El paisaje es una fuente de inspiración inagotable. El entorno varía con el suceder de las estaciones que nos dan momentos de luz, niebla, lluvia, nevadas… y muchas veces nos sorprenden y ofrecen sensaciones que son una mezcla de sentimientos personales y aspectos visuales.
Es interesante captar momentos que nos transportan a un estado anímico que nos hace revivir un paseo por un campo, una tarde nublada, un día de sol, un momento estimulante o una nostalgia de recuerdos. Todo se puede revivir con los pinceles en la mano… y muchas veces es más importante sugerir que contar.
Las técnicas por un pintor pueden ser muchas, todas ellas valoradas, pero es importante transmitir en imágenes de formas y colores, un sentimiento compartido y establecer un diálogo con el observador. Todo en libertad, evolución y sinceridad.
Josep M. Mejan
«Detrás de la pintura de Mejan hay una persona, como suele ocurrir en todas las acciones humanas que pretenden tener una cierta trascendencia. También hay una biografía estructurada a base de dejar de lado los hechos concretos que tanto se imponen en el día a día y de generar un conjunto de pensamientos, deseos e ideas que ya existían en estado embrionario».
Texto de Josep M. Cadena